Pensemos que todo es un sueño

Camps y Costa inocentes.  El veredicto del jurado ajustado, ahora a esperar los términos de la sentencia. Un veredicto que a nadie, excepto a los suyos que los están elevando a los altares, ha convencido. Yo creo que muchos de los que están dando ahora la cara por ellos, lo están haciendo con la boca pequeña. Tiempo al tiempo, no lo deben tener muy claro.
La sentencia seguro que la recurrirán, aunque no se si sacarán algo en claro. De todas formas, el juicio por los trajes es una menudencia para lo que hay por detrás, y hay gente dispuesta a seguir. Lo verdaderamente gordo puede ser la justificación de por dónde se han ido los millones de euros que faltan en las arcas y que han llevado a la comunidad valenciana a la bancarrota. Por de pronto, los recortes, están afectando a sanidad, enseñanza, etc.
En concreto quiero centrarme en la enseñanza. Hoy he pasado por las puertas de la guardería donde han ido mis hijos y hay un cartel denunciando que le Generalitat no les paga. Es un colegio concertado. Y, donde ahora están estudiando, me comentan que están recortando en luz, apagando luces. Mañana que no les van a poner la calefacción, etc.etc.etc....
Se pretende que justifiquen esos millones que faltan, ¿lo conseguirán?. Por de pronto trabas van a haber un montón, pero, el tiempo no pasa en vano y al final todo se sabrá. De momento nos toca pagar los platos rotos, que otros han roto.
La justicia, como dijo Aquél, ha de ser igual para todos, pero, como siempre, la teoría dista mucho de la práctica y la justicia no trata a todos por igual. Eso demuestra que estamos en una democracia débil, frágil, y sería una pena que en lugar de avanzar retrocedamos. No falla la democracia, los que fallan son los falsos demócratas. Por nuestro bien confiemos en que se trate solo de un sueño y finalmente triunfe la sensatez .

Érase una vez, "Las estrellas saben nadar" y Colorín colorado

 

El niño quería escuchar un cuento, como todas las noches. Su madre al borde de la cama tomó un libro de cuentos y se dispuso a leer uno al azar: los tres cerditos.

“En el corazón del bosque vivían tres cerditos que eran hermanos.......”

-No mamá, así no.

-¿Por qué, así no?

-Porque falta “Érase una vez”. Si no,  no es cuento.

-¡Claro que es cuento!. Érase una vez, es una forma de empezarlos, pero no es necesario que comiencen así.

-No se, pero a mi me gustan así.

El  niño quería escuchar un cuento nuevo, que no estuviera en el libro de cuentos. La madre, desprevenida, quedó con la mente en blanco. El niño, salió en su auxilio, quería escuchar un cuento sobre estrellas que sabían nadar.

La madre, le dijo que las estrellas eran luces que estaban en el cielo, muy lejos de aquí, y no sabían nadar.

Y empezó a contarle:

 “Érase una vez, en el cielo, la Osa mayor y la Osa menor, son estrellas que cuando se aburren juegan a formar figuras, las otras estrellas saltan de una a otra, y se lo pasan muy bien. Y las estrellas fugaces, que son estrellas que juegan al escondite, y van tan rápido porque son muy veloces, para que no las pillen. Y el Sol  también es una estrella muyyyy... grande y que gracias a él estamos vivos....”

La madre se defendía como podía y el niño atendía con interés.

-Pero mamá, las estrellas saben nadar, porque no se ahogan, quiero que me cuentes cómo aprendieron a nadar.

-No hijo mío, en todo caso las estrellas saben volar, como los pájaros. Solo tienes que levantar la vista al cielo y enseguida lo comprobarás.

-Si mamá, saben volar, pero también saben nadar, y yo puedo enseñártelo.

La madre, empezaba a preocuparse porque, a su buen entender, los cuentos son parte de la imaginación, los niños así lo comprendían, y el empecinamiento de su hijo la intranquilizaba.

Con la promesa de que al día siguiente le daría la oportunidad de enseñarle que las estrellas saben nadar, y tras el “Colorín colorado”, porque así debían terminar los cuentos, según el niño, se durmió.

A la mañana siguiente, al niño no se le había olvidado la promesa que su madre le había hecho, y ésta debía cumplir su palabra.

-¿Cómo vas a demostrarme que las estrellas saben nadar?

-Al atardecer, cuando anochezca, quiero que me lleves al mar.

Así lo hizo la madre, vivían cerca de la costa, el cielo estaba estrellado. Se acercaron al mar que estaba tranquilo, sin apenas oleaje. La madre pudo contemplar el reflejo de las estrellas en el agua, y pudo comprobar que su hijo no mentía. Las estrellas sabían nadar.

 

Ser valenciano, motivo de orgullo

Cuando se conformó el nuevo gobierno ya hice referencia a la ausencia de políticos valencianos. Esta ausencia se ha trasladado también al segundo escalón, y mas bajo no sabría decir.
Si sentirse valenciano es motivo de orgullo, viendo la imagen que están dejando los que nos han gobernado y gobiernan, nos da que pensar el concepto que de nosotros se tendrá fuera de nuestras fronteras.
Estamos en la ruina. Con nuestro dinero se ha financiado multitud de cosas, y financiar no quiere decir despilfarrar. Terra Mítica, Aeropuerto de Castellón ( su nueva estatua y el negocio adjunto que se ha destapado), El Agora, el nuevo Mestalla, la Copa América, la Fórmula 1, el Museo P. Felipe, el Reina Sofía, la venida del Papa, la Ciudad de la Luz, Urdangarín, etc.
Todo ello ha servido para dejar escapar millones y millones de euros, los que ahora hacen falta. Todo se ha hecho con nuestro dinero, a costes desorbitados. Algunos de ellos se han vendido muy por debajo de su coste.
Estamos hipotecados con la Formula 1. No hay dinero para pagar los derechos contratados y por si fuera poco, si no se hace, también nos penalizarán. Hemos pagado los despilfarros y ahora nos tocará también sacar el dinero que hace falta para tapar todos estos agujeros.  Facturas abultadas, ¿Dónde ha ido a parar ese dinero?.
Los responsables están ahí, en boca de todos, y a pesar de ello, como encantadores de serpientes, llegan elecciones autonómicas y se las llevan de calle. Cuando sales fuera de Valencia, la gente se hace cruces, y no te queda otra que asentir con la cabeza con un gesto de resignación. No tenemos respuesta a ello. Y no me extrañaría que si se hicieran otras elecciones, volverían a ganar. El concepto que puedan tener por ahí hasta puede que nos lo merezcamos.
Ahora el tema está tomando otro cariz. Han vuelto a ganar las generales, y como plaza fuerte que siempre ha sido Valencia, esta vez hasta ellos mismos la han marginado, como si no quisieran impregnarse con el barro que está salpicando a estos dirigentes. Esta actitud del nuevo gobierno deja bien a las claras que  es consciente de la delicada situación. Son sabedores y no quieren tener cerca a nadie que les recuerde el grave problema, o peor, que no puedan depositar confianza en nadie afecto a esta comunidad. Está tomando tal cariz a medida que pasan los días que tendrá que estallar. Un buen dirigente, de un partido que se precie, debe coger el toro por los cuernos y extirpar el cáncer que lo está royendo. El problema es que está demasiado extendido, y regenerarlo en su totalidad es bastante complicado, que no imposible, también deben tener gente honesta en sus filas,  pero si no quiere ser victima de su propia debilidad, algo tendrá que hacer.
Esto es grave por la imagen externa que estemos dando, con el agravante de que se piense que todos somos iguales, que ser valenciano es sinónimo de ......
Desde aquí quiero reivindicar que ser valenciano sigue siendo un orgullo, como lo pueda sentir un gallego, un maño, un madrileño, ...cualquiera. Que unos valores no son fruto de un día. Valencia está construida con el sudor de unas gentes que han trabajado y siguen trabajando de sol a sol, en una tierra agradecida. Gentes de aquí y gentes que, desde otras partes, han querido enriquecerla con su aportación y su cultura. Somos acogedores porque a nosotros en otras épocas también nos acogieron y nos dieron la oportunidad de ganarnos el pan, y eso lo sabemos reconocer y agradecer.
Por ello, quiero reivindicarnos y decir a quien tenga ocasión de leer esto que no todos somos iguales, que unas cuantas manzanas podridas no son suficientes como para arrebatarnos la honestidad y la dignidad conseguida a lo largo de muchos años.

¿Lobos o Corderos?

¿Aguantarán el tirón?. Esta es la cuestión.
     El PP se ha esforzado mucho por llegar donde está. Ha vendido su marca como el no va más, lo mejor del mercado. El mejor aparato para solucionar los problemas de casa. Ahora, quienes lo hemos (hablo en general asumiendo el resultado) adquirido embelesados con sus maravillosas propiedades: Bueno, Bonito, ¿Barato?., estamos observando que el aparato ha salido defectuoso, no se ajusta a las especificaciones. Por lo tanto, estamos aún en tiempo de devolverlo.
     Si el margen de confianza a un nuevo gobierno es de cien días, aún estamos a tiempo de devolverlo. No ha pasado ni un mes y, lo único que han hecho es incumplir lo prometido.
     Aparecieron todos su barones como lobos antes de las elecciones y ahora salen (menos el jefe de la manada), como corderos, poniendo cara de buenos, como amigos, dando la palmadita en la espalda. "no preocuparos, es solo por un tiempo". Estas cosas temporales son las que más miedo me dan, como aquel jarrón que dejas en un estante hasta encontrarle el lugar definitivo y siempre lo ves allí. Ese es el peligro.
      Mientras te recortan, afectando a bolsillos precarios, no paran de salir informaciones de lo que gana éste por aquí y aquel por allá. Cantidades desorbitadas, varios sueldos, pensiones vitalicias. ¡Viva los recortes!.
      Apenas han comenzado la legislatura y han enrarecido el panorama de tal manera que ésto va a más. Protestas por aquí y por allá. Hoy mismo han abordado la sede del gobierno de la Generalitat Valenciana, la quebrada Comunidad Valenciana, la que más floreció en la bonanza, la que más despilfarró. Me acuerdo cuando el crecimiento estaba muy por encima de la media nacional, cuando se creaban muchos puestos de trabajo, gracias al gobierno Camps, gracias a la "cultura del ladrillazo". Luego el desastre ha venido por "culpa" de Zapatero. Es de indignidad política y, sobre todo humana, atribuirse lo bueno y echar la culpa a otro de lo malo.
       He vivido varias crisis, cada cierto número de años se produce alguna, y se salía relativamente pronto. En esta, vamos para cuatro años y la sensación es de que se tardará en salir. Creo que debe haber alguna mano negra que está impidiendo se resurja. Y menos mal que los países petrolíferos andan calladitos, porque tampoco les interesa. Cuando esto se vaya arreglando no me extrañaría volvieran a la carga.
       Si una de las claves está en la activación del consumo, porque la gente está deseosa de consumir, pero hay miedo a gastar más de la cuenta, hay que comer ante todo, aunque sea pan. Imagino que esto es bueno para los horneros, cuando menos pan se come es cuando el nivel de vida está alto, ahora que está bajo hay que llenar el buche con pan y poca mezcla.
       No quiero ser pesimista y confío en que esa mano negra se ponga el guante, pronto. Esta situación a lo único que puede dar pie es al resurgimiento de idearios extremistas que no son nada aconsejables.
       
     

"En política todo vale"

Esta reflexión va dirigida a los entendidos.
Cuando una obra importante sale a subasta, los interesados en acometerla ofrecen sus condiciones y, quien la encomienda, debe comparar condiciones y tomar la más ventajosa.
Extrapolado a unas elecciones, en este caso para dirigir un estado, los interesados en hacerse con las riendas, exponen su pliego de condiciones, y luego, el electorado, elige la que considera más ventajosa.
No creo que esto esté reflejado en la constitución, por ello, sería conveniente quedase plasmado, que si no se respeta lo ofertado plantear otra subasta (o consulta).
Una empresa, como mandan los cánones, se preocupará de cumplir lo pactado (plazos, calidades, costes, etc) para que no le retiren la contrata. En política, parece que existe inmunidad para todo, hasta aforamientos, como si fueran intocables.
Todo político que se precie habla de regenerar la política y los políticos pero, como es habitual, todo queda en palabras mientras se consiga su objetivo. Hay una frase que lo define perfectamente  "en política todo vale".
En política, al contrario, se le menosprecia, se le insulta, se le dice las verdades a medias, las que interesan, las que convienen. Se trata de confundir al contrario, se trata de conseguir un objetivo con independencia de las formas.
Me gustaría pensar que hay políticos que tienen una verdadera vocación por hacer cosas en beneficio de los demás, pero lo están poniendo bastante difícil. Cada día afloran casos de supuestas corrupciones, despilfarros incontrolados, que han salido de nuestros bolsillos y ahora, como si se tratara de una doble imposición, de nuestros bolsillos tiene que salir el caudal para taponar esos agujeros.
Está bastante claro que hay organismos que sobran, y quizá falten otros con una verdadera función.
Yo reorganizaría el Senado como un órgano técnico formado por economistas, legisladores, no para aprobar o desaprobar leyes, sino para controlar las autonomías y ayuntamientos importantes, para velar por su correcta gestión. Un órgano lo más independiente posible, que se ocupe de fiscalizar, con capacidad de encender la luz roja, con autoridad y con la facultad de sancionar. Esta función no puede quedar al cargo de unas cuantas personas, como los Síndicos de Cuentas, o algún departamento en los ministerios de Economía o Hacienda. Es algo más complejo.
Los políticos deben empezar por limpiar esa frase de "en política todo vale". Deben empezar por asumir sus compromisos y si son incapaces de cumplir lo prometido pues...., ya saben. Por ahí se empieza la verdadera regeneración política y el intento de que la gente vuelva a confiar en ellos. Entrar en política es para ganar algo, esa es la idea general, la única que no gana, La Política misma.

Logica o Proporción

Hoy he leído en el blog lc-architects, refiriéndose a un libro de cuentos: El Hombre que calculaba. Este libro entiendo que, al parecer porque hasta ahora desconocía su existencia, usando el cuento como hilo conductor plantea cuestiones matemáticas. Resumiendo el cuento del resumen que podéis ver en ese mismo blog, plantea un dilema que afecta a tres personas A B C. A aporta  5 panes, B aporta 3 panes, para repartir entre los tres. C no aporta panes pero tiene 8 monedas a repartir. Por lógica, la primera impresión, es que  C debería entregar 5 monedas a A y 3 monedas a B. Finalmente C llega a la conclusión de entregar 7 monedas a A y 1 moneda a B.

Inmediatamente, sin premeditación ni alevosía, lo he extrapolado a la situación económica actual y a la toma de decisiones que en materia fiscal ha tomado nuestro querido gobierno y adyacentes.

Vamos a extrapolar el cuento y pensemos que hemos de sacar para que cuadren las cuentas 8 monedas. El 60 % de las monedas, o sea, 4,8 monedas salen de los que tienen el 20 % (A)de las rentas, y 3,2 monedas saldrán de los que tienen el 80% (B)de las rentas. Cuando, si se hiciera de una manera proporcional, como demuestra el cuento, 1,6 monedas deberían salir del grupo (A) y 6,4 monedas del grupo (B).

La moraleja de ésto es que el peso de las medidas recae siempre sobre el grupo más débil. Aparentemente es el grupo que soporta los porcentajes más bajos de la subida, entre el 2 y el 4%, pero no es lo mismo que le quiten a un asalariado que gane 1000 € un 2 % más, que a uno que gane 10000 € le quiten un 10 % más. El segundo podrá seguir viviendo con toda normalidad, sin pasar apuros. El primero tendrá, como el gobierno, buscar por dónde hacer más recortes en su maltrecha economía para poder subsistir.

Esta es la medida que más hondo ha calado por ser a nivel nacional, pero no hay que olvidar otras medidas a nivel local, autonómicas. Las Autonomías, bastante culpables de la situación actual por su derroche sin control, por su deplorable gestión, muchos se cuestionan ya su utilidad, fuera de ser un bastión donde se apoltronan un sinfín de políticos. Éstas también quieren modificar el IRPF autonómico, por lo que ese 2 ó 4 %, será anecdótico.

Y por si fuera poco, las gasolinas, que muchos dependemos de ella para poder "trabajar", las cargan con ese céntimo famoso. Y por si no es bastante, sube el gas, suben tasas, como la de las basura no un 2, ó 4 %, sino un 300%. El IBI, subirán los alimentos, subirán muchas mas cosas subirán.

Seguramente el poder adquisitivo pueda bajar un 10 % como mínimo. El grupo B apenas tendrá que ajustarse, el grupo A tendrá que hacer malabarismos 

Los sueldos, quien tenga la suerte de que no le bajen ó se queden igual, no les van a subir más de un 1 ó 2 %. No subirá tampoco el SIM, Dicen que no subirá la luz, no subirá el IVA, podrían enumerar aquello que no va a subir, ahí se ahorrará en papel.

Todo esto después de oír hasta la saciedad que no subirían impuestos si llegaban al gobierno, tratando a los anteriores, mas menos, como enemigos de la patria por querer hacerlo. No cabe duda que esta panfletada ha tenido bastante que ver en su victoria porque ya hay, entre sus votantes, voces discordantes con las medidas tomadas porque no se ajustan a su ¿programa? y por el cual les votaron.

Si el poder adquisitivo mengua, tendremos miedo a gastar, la economía se estancará, no se generará empleo. Esta era la piedra filosofal de la campaña electoral "CREANDO EMPLEO", con esta premisa se arreglará todo, como el cuento de la lechera: Creando empleo, se recauda más impuestos, más para la seguridad social, se pagan menos subsidios, etc, etc...., y colorín colorado.

Los cuentos, mucha gente piensa que son para los niños. Los cuentos son mas bien para mayores. Deberíamos leer más cuentos por aportar moralejas aplicables a si mismo y a la vida en general. Los cuentos nos deleitan y nos enriquecen. En especial los políticos, de cualquier signo, debería tener cuentos en su mesita de noche. Los cuentos nos muestran una realidad que subyace en lo cotidiano quitándonos ese velo que, como cataratas, no nos deja verla. Nos enriquecen, nos deleitan, nos dan que pensar, cuantos más cuentos leamos mejores seremos, y si nos dedicáramos a la política, podría ser bueno hasta para el interés general. Así yo recomendaría  "El Hombre que Calculaba" de Malba Taham (seudónimo de un brasileño). Es de los años 30 ó 40, no debe ser fácil de encontrar pero, trataré de buscarlo.
Esta información procede de lc-architects, se la tomo prestada.
Gracias Quico, me has inspirado.

¿Dónde está Rajoy?

Acaba de aterrizar incumpliendo las pocas promesas que hizo,  "no subir impuestos". Es de las pocas cosas en que se desgañitó a diestra y siniestra, secundado por sus delfines. Ahora viene y lo primero que hace es subirlos. Esto puede dar una idea de lo que va a hacer y que no ha dicho, todo quedaba en el aire.
Por si fuera poco, parece que ya hay varios ministros que andan a la greña, Economía, Hacienda e Interior, como si cada cual quisiera imponer su ley o quisieran adueñarse de la gran parcela. Mientras tanto, que pasa con Rajoy, está de vacaciones, está escondido. Donde manda patrón no manda marinero, y aquí da la sensación de que no hay patrón y cada marinero va a lo suyo.
Rajoy puede fracasar como presidente por no saber dar un golpe sobre la mesa y decir, aquí mando yo. Eso Aznar si sabía hacerlo. A Rajoy le falta carácter y como se descuide se lo van a comer los propios.
Cuando las votaciones, Rubalcaba, era vitoreado como presidente por los suyos, éste se sabía perdedor y esbozaba una sonrisa, la sonrisa del perdedor. Rajoy, se sabía ganador, y ante los vítores de los suyos su sonrisa era de angustia, del pensar ¿Dónde me he metido?, ¿Voy a estar a la altura?, se le veía con el miedo en el cuerpo, como si dudara de si mismo. Pero el paso está dado y no le queda otra que salir a la palestra, tomar las riendas y decir aquí estoy yo para aguantar el chaparrón. Debe exigirse lo que siempre ha exigido cuando estaba en la oposición, pero, ¡ah!, los cuernos no se ven igual desde el ruedo que desde la barrera.