Por fin llegó el día, y una mayoría ha querido ejercer su voto libremente. Los escaños, a falta de algunos flecos, se han asignado y lo que más salta a la vista es que hay partidos que con 42372 votos han conseguido un escaño, y otros que con: 211189, 99500,95995,74362,57735, no han logrado ninguno.
Ello evidencia que el sistema de elección de diputados no es bueno, y buena parte de la sociedad demanda un cambio. Los partidos mayoritarios seguirían siendo mayoritarios, aunque con menos escaños, lo cual no les interesa de ahí que se me antoja casi imposible que ésto pueda modificarse.
Para conseguirlo el debate debería estar en la calle con más intensidad y forzar a los políticos a que hablaran el tema con más interés, con una voluntad y un compromiso real, porque puede llegar el día que la gente se indigne realmente y con la fuerza de su voto logre cambiar la orientación del mismo, y lo que en un momento dado benefició a un partido, podría darse el caso de que llegara a perjudicarle.
Con un reparto más proporcional hay partidos como IU, y UPYD, hubiesen logrado un considerable aumento en la asignación de escaños, duplicando y hasta triplicando el número conseguido. Y algunos de los partidos minoritarios hubiesen obtenido alguno más y algunos que no los han conseguido podrían tener su representación.
El bipartidismo, aunque seguiría existiendo, tendría menos consistencia y se verían obligads que contar con las opiniones de aquellos que también tienen algo que decir y se ven con una mordaza en la boca.
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